María Dolores Cabezudo Ibáñez
Nació en Madrid en 1935. La guerra civil española hizo que su familia se trasladara a Brihuega (Guadalajara) y una vez acabada esta, a Zaragoza. Es aquí donde cursó los estudios de Ciencias Químicas. Una vez concluidos se trasladó a Madrid, donde comenzó su carrera investigadora. Su acceso a la investigación le llegó cuando conoció a la Dra. Concepción Llaguno Marchena, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), quien se ofreció a ayudarla junto con el director del departamento de Fermentaciones Industriales, José Garrido Márquez. Lola Cabezudo terminó el doctorado en el año 1967 mientras trabajaba como directora del Colegio Universitario Isabel de España. Su tesis versó sobre el metabolismo de ciertas levaduras vínicas en aerobiosis. Posteriormente, su etapa postdoctoral la realizó en el Departamento de Viticultura y Enología de la Universidad de California, en Davis (EEUU), bajo la dirección del Prof. Mainard A. Amerine.
Desde la etapa predoctoral llevó a cabo su labor investigadora en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), y concretamente en el Instituto de Fermentaciones Industriales (CSIC) en el equipo de la Doctora Llaguno, al que perteneció durante 25 años y en el que desarrolló toda la primera parte de su carrera científica. En el año 1986 fue nombrada profesora de investigación. Desde el curso 1988-89 simultaneó
su labor de profesora de investigación del CSIC con las tareas de profesora asociada a la Universidad de Castilla La Mancha (UCLM). En esta Universidad Lola sentó las bases y es la autora del programa curricular de la carrera de Ciencia y Tecnología de los Alimentos, para lo que se inspiró en los planes de estudios en vigor en los países de nuestro entorno (Francia, Italia, Reino Unido, Alemania, Portugal, Italia y Turquía) y en los títulos de varias universidades norteamericanas. En el año 1994 quedó excedente del CSIC y obtuvo por oposición la Cátedra de Universidad de la especialidad de Tecnología de Alimentos, pasando a pertenecer a la UCLM en exclusiva hasta septiembre del 2006, año en que se jubiló.
Aportaciones científico-tecnológicas:
Sus principales aportaciones científico-tecnológicas se enmarcan en las disciplinas de la química analítica (diseño y construcción de columnas de fases mixtas para cromatografía de gases), en las ciencias enológicas (caracterización de mostos y vinos de variedades autóctonas y extranjeras, identificación de cepas de levaduras de interés enológico, selección de levaduras de “flor”, influencia de las técnicas de elaboración en la calidad de los vinos), así como en el análisis sensorial de alimentos (aplicación del tratamiento estadístico de datos sensoriales). Su fructífera producción investigadora se ha plasmado en más de 150 publicaciones científicas de las que Lola Cabezudo es autora o coautora, la mayoría de ellas en publicaciones internacionales de alto índice de impacto. Además, ha participado y presentado aportaciones científicas en innumerables congresos y simposios especializados, tanto nacionales como internacionales. Ha sido a su vez investigadora principal de un total de 22 proyectos de investigación financiados por organismos internacionales (UE), la administración central o regional, así como de más de una decena de proyectos financiados por empresas privadas o fundaciones. También forma parte del equipo inventor de tres patentes.
Reconocimientos nacionales e internacionales:
Lola Cabezudo ha sido cofundadora del grupo especializado de Cromatografía y Técnicas Afines (GCTA) de la Real Sociedad Española de Física y Química y ha formado parte de los comités de prestigiosas asociaciones internacionales y nacionales, como la Internacional Organization of Standards, la Comisión de Becas Fullbright para españoles, el Stearing Group Science for Stability de la OTAN y l’Office International de la Vigne et du Vin. También ha pertenecido a la Junta de Gobierno de la Asociación de Técnicos de Cerveza y Malta y a las Comisiones de Análisis Sensorial de IRANOR y de AENOR, así como a los comités científicos de varios simposios internacionales relacionados con la cromatografía, la enología y las ciencias de los alimentos.
Ha sido además reconocida con un gran número de distinciones, como la del Consejo Regulador de la Denominación de Origen “La Mancha” (año 2000), la Mención Honorífica de la 2ª edición de la Feria FENAVIN (2003) y la Medalla de Oro de la Federación Española de Asociaciones de Enólogos (2005). También ha sido galardonada con el Premio Gabriel Alonso de Herrera por la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha (2007). Este es el máximo de los cuatro grandes premios que la Junta concede todos los años, y destaca la investigación científica de excelencia. Posteriormente, también se le concedió la Insignia de Oro y Brillantes de la Asociación Nacional de Químicos de España (ANQUE). Además, desde su jubilación en 2006, otras distinciones que ha recibido han sido la Medalla de Oro al Mérito en la Investigación y en la Docencia Universitaria, impuesta por el Ministro Pedro Duque (B.O.E. 3 de mayo de 2019), el nombramiento como Hija Adoptiva de Castilla la Mancha (31 de mayo de 2019) o la Medalla de la Academia de Gastronomía de Castilla La Mancha, entregada por su presidente, José María Sanromán del Águila.
María Ángeles del Pozo Bayón, Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (CIAL-CSIC)
Fuente: CSIC