Poesía y Flamenco tejen un sentido homenaje a Félix Grande en Tomelloso

Por Francisco Navarro

Publicado en Lanza Digital el 2 de febrero de 2025

A un día del aniversario de su muerte, el 31 de enero, en el Auditorio López Torres con la palabra y el flamenco se tejió una magnífica velada en honor del poeta y flamencólogo.

Tomelloso rindió este sábado un bello y sentido homenaje a Félix Grande. A un día del aniversario de su muerte, el 31 de enero, en el Auditorio López Torres con la palabra y el flamenco se tejió una magnífica velada en honor del poeta y flamencólogo. El Ayuntamiento de la ciudad y la Academia de Ciencias Sociales y Humanidades de Castilla-La Mancha, al alimón, organizaron las jornadas Literario-Musicales “Félix Grande y el Flamenco”. El homenaje contó con la participación de Dionisio Cañas, el profesor y flamencólogo Ramón Soler, el artista flamenco Ricardo Fernández del Moral, la Asociación Amanecer y la Peña Los de Montoya y Chacón”.

Un acto que tuvo una buena respuesta del público que casi lleno el Auditorio López Torres. Conducido por la directora de la Biblioteca, Carmen Labrador, participaron en el homenaje la concejala de Cultura, Inés Losa, la secretaria de la Academia de Ciencias Sociales, Soledad Campos y el presidente de la Sección de Literatura, Rafael González Cañal. Asistieron los hermanos del homenajeado, la concejala de Turismo, Rocío Valentín, miembros de la Academia y aficionados al flamenco que disfrutaron de la velada.

La primera de muchas colaboraciones

Cuando surgió la idea de homenajear a Félix Grande, explicaba Rafael González Cañal, la Academia tuvo claro que tendría que estar centrado en el flamenco, principalmente. Con gran acogida por parte del Consistorio, apuntaba el profesor, la del sábado es la primera colaboración entre ambas instituciones “que esperemos que vengan muchas más”. Ha agradecido el académico al Ayuntamiento las facilidades “para poder celebrar este acto”. La secretaria de la Academia, Soledad Campos, incidió en la importancia de una colaboración que “esperamos que sea fructífera en el tiempo”

La concejala de Cultura, mostró su alegría “por acoger hoy un acto tan importante”. Un homenaje, recalcó la concejala, que surge a iniciativa de la Academia de Humanidades “y, además, coincide con la próxima recepción por parte del Ayuntamiento del legado de la familia Grande-Aguirre y con el aniversario, ayer viernes, del fallecimiento de Félix Grande”. Dio la gracias a la familia de Félix Grande por una donación “que estará el mismo espacio con la de Dionisio Cañas”. Losa ha subrayado que ambas instituciones “confluimos en el mismo sentir que es apoyar el flamenco en la figura de Félix Grande”. Y es que, apuntó, Tomelloso está muy ligado al flamenco y “en Félix ha tenido su máximo exponente”. La edil de Cultura, que elogió la calidad e importancia de los ponentes, agradeció el trabajo de la Biblioteca Municipal.

Analógico versus digital en la poesía de Félix Grande

La charla de Dionisio Cañas llevó por título “La poesía de Félix Grande en el contexto analógico”. Comenzó su intervención con la frase “La poesía es una mentira en la que se descubre la verdad de la vida”. Defendió el poeta que la obra de Félix es fundamentalmente “autobiográfica, posicionada en una época muy concreta. Es un reflejo de su época”, absolutamente analógica. Y es que, señalaba Cañas, la poesía se escribe siempre desde un momento histórico muy concreto: en el caso de la poesía de Félix Grande fue escrita en España entre 1961, Taranto. Homenaje a César Vallejo y Las rubáiyatas de Horacio Martín, 1978. Luego, señalaba Cañas, “unos años antes de morir, nos sorprendió con un último tomo de poesía, Libro de familia, en el 2011, desgarrador y tan autobiográfico como su famoso La balada del abuelo Palancas en 2003”.

Lo vivido, de una época anterior a la digital, siguió explicando el poeta condiciona su obra. Félix, que se nutre de la mejor poesía española, se enriquece con otros autores internacionales y de las vanguardias. Especialmente en Blanco sprituals de 1967, “como un valor añadido, la poesía de Félix grande se contagia del cante flamenco, de la música de su época, del jazz, de la canción española, latinoamericana, norteamericana, inglesa y francesa”. La versatilidad auditiva y escritural hace que los críticos no sepan situar a Félix, cronológico, ni estético. Un poeta puede navegar por estilos y temas diferentes, defiende Cañas.

La digitalización influye en nuestro entorno y en la poesía en general “si ponemos Félix Grande en Google “nos sale es la apabullante cifra de “aproximadamente” 76.700.000 resultados”. Muchos de ellos, “surrealistas”, por lo que Cañas tiene claro que “si no tenemos control sobre las herramientas digitales no nos servirán para informarnos de un poeta de la época analógica”.

La poesía, forma parte de las humanidades que, junto con la ciencia e incluso la religión, estudian “el impacto de las nuevas tecnologías y de la IA en particular en nuestra existencia”. Y es que, tanto influirá la Inteligencia Artificial en el futuro “que hasta el Papa habla de ella” Terminó con una cita de Francisco “que bien podía haberla escrito Félix Grande”.

A Félix Grande le emocionaban las voces que estremecían

Subrayó Ramón Soler —que nos dejó boquiabiertos con su erudición agradable sobre el flamenco— que la música fue algo esencial en la poesía de Félix Grande. Y, lógicamente, el flamenco por cercanía está muy presente en los versos del tomellosero. En la obra de Félix, el género tiene dos vertientes, la poética y la investigación.  Precisó el flamencólogo que al poeta “le emocionaban las voces que estremecían”. Es por ello que entre la eterna dicotomía flamenca “entre lo trágico y la juerga”, Félix elegía lo primero.

Sin duda, “Memoria del flamenco”, apuntó el profesor, fue su mayor obra sobre el género, por la que ha pasado a la historia. También citó la “Agenda flamenca” y las “maravillosas contraportadas que Félix escribía a los discos de Paco de Lucía”.

El flamenco, es una de esas músicas “por la que siempre preguntamos su origen. Es como un injerto oriental en occidente”. Explicó que es un género que se nutre de muchas músicas, desde el Siglo de Oro y que “precipita” en el siglo XIX. Y lo hace en Cádiz, teniendo mucho que ver con la necesidad de afirmación nacional después de la Guerra de la Independencia. Nace el flamenco, recalcaba Soler, como la reinterpretación de la música del XIX y que, “como un ente vivo que es, evoluciona gracias a los profesionales”.

El flamenco más que una música es una forma de hacer música

Y es un gran profesional el que ocupó el escenario del Auditorio López Torres, el daimieleño Ricardo Fernández del Moral. “El cante Grande contado y cantado” fue el título de su intervención. Lo contó, junto a Ramón Soler, en una animada y jugosa conversación —entre pieza y pieza— en la que no faltó el salero de las anécdotas ni el saber de ambos. Una entretenida manera de conocer los distintos palos y toques flamencos.

Comenzó el cantaor y tocador con una soleá —uno de los pilares del flamenco, señalaron— con textos de Félix Grande. La voz prodigiosa del daimieleño deleitó a continuación al respetable con una farruca. Apuntó Ramón Soler que “el flamenco más que una música es una forma de hacer música”. Siguió el recital con una petenera, “uno de los cantes tradicionales y con más leyendas”. Cambió de tercio el artista y se metió en los “cantes por alegre” con unas aplaudidas alegrías de Cádiz. Defendió Ricardo Fernández los origines manchegos (la jota, la seguidilla, el fandango…) de muchos cantes. Acabó con unas bulerías con las que homenajeó Fernández del Moral a interpretes “malditos” como Bambino o María Jiménez. El público premió a los intervinientes con una gran ovación.

Culminó la velada con la intervención de componentes de la Asociación Cultural Amanecer y de la Peña Los de Montoya y Chacón que pusieron el broche al merecido homenaje a Félix Grande.

El Diccionario biográfico de CLM suma ya 600 entradas de personajes de la región

Por Laura Espinar

Publicado en Lanza Digital el 21 de mayo de 2024

Las biografías pertenecen a científicos, médicos, artistas, ingenieros, profesores, abogados,, periodistas, inventores, así como de ámbitos como la iglesia y la milicia, el deporte y la empresa de los siglos XIX y XX.

Las biografías de Antonio Hurtado de Mendoza Gómez-Cornejo, pintor de Valdepeñas, del poeta pidrabuenero Nicolás del Hierro; de la religiosa de Daimiel Consuelo Utrilla Lozano y del pintor ciudarrealeño Manuel López Villaseñor figuran entre las últimas historias de vida que están incorporadas ya al Diccionario Biográfico de Castilla-La Mancha que suma ya 600 entradas de otros tantos personajes de la región.

Este proyecto de la Academia de Ciencias Sociales y Humanidades de Castilla-La Mancha se puso en marcha a primeros de ese año y en el mismo han colaborado ya más de 120 autores de las cinco provincias y está coordinado por el historiador Isidro Sánchez Sánchez y el periodista y editor Alfonso González Calero, ambos miembros de la Academia y a quienes ésta les encargó la puesta en marcha este ambicioso proyecto.

De ese total de 600 biografías que incluye el Diccionario, no llega al centenar el número de ellas que tengan como protagonistas a mujeres castellano-manchegas (86) pese al empeño mostrado por los promotores del proyecto por incrementar este número y, de ahí, el llamamiento realizado -en numerosas ocasiones- a quienes pudieran conocer el trabajo destacado, en cualquier ámbito, de mujeres de nuestra tierra para que no quede en el olvido y, por el contrario, contribuir a su reconocimiento.

Una plataforma de búsqueda

El objetivo de los coordinadores del Diccionario es, a su vez, situarlo como una plataforma de búsqueda de información para las personas interesadas en cualquier aspecto de la historia de Castilla-La Mancha, como ahora pueden serlo tanto Wikipedia como el Diccionario Biográfico de la Real Academia de la Historia.

Las biografías incluidas en el Diccionario pertenecen a científicos, médicos, artistas, ingenieros, profesores, abogados, escritores, cineastas, periodistas, inventores, pedagogos, así como personas de ámbitos como la iglesia y la milicia, el deporte, la artesanía y la empresa, ya fallecidos, de los siglos XIX y XX. En definitiva, mujeres y hombres que amaron Castilla-La Mancha bien como lugar de nacimiento o de adopción.

Por provincias, de las 600 biografías terminadas, el 25% son de personajes de la provincia de Ciudad Real seguida de la de Toledo (24%), Guadalajara con el 19%, mientras que las provincias de Albacete y Cuenca llegan al 16%.

El Diccionario está inserto dentro de la página web de la Academia de Ciencias Sociales y Humanidades: https://diccionariobiograficodecastillalamancha.es/ donde las personas interesadas pueden acceder al personaje a través del apartado “Biografías publicadas”, cuya búsqueda aparece ordenada alfabéticamente por el apellido para facilitar un acceso más rápido.

En el apartado “Galerías destacadas” donde se refuerza el contenido gráfico, además del propio texto, aparecen 27, hasta ahora, de otros tantos personajes entre los que podemos destacar a Sara Montiel, Arsenia Tenorio, Joaquín García Donaire, Mary Carrillo, Óscar Benedí, Francisco Carretero, Ángel Andrade, Ángel Alcaide, Ángel Crespo, Gregorio Prieto, Miguel Prieto, o Benjamín Palencia, entre otros.

Las “últimas biografías publicadas” incluyen, además de las ya mencionadas, las del presidente del Real Madrid, Santiago Bernabéu de Yeste (Almansa, Albacete); Carlos Risueño Mora, veterinario de Daimiel; Mariano Álvarez Sánchez, damasquinador, cincelador y empresario de Toledo; Amparo Serrano Nieto, médica nacida en Quintanar de la Orden (Toledo) y el historiador y profesor de Guadamur (Toledo) José María Ruiz Alonso, entre otros nombres hasta un total de 16 biografías.

Preservar un legado

El objetivo de los impulsores del Diccionario biográfico es el de preservar un legado cultural, científico y humanístico de Castilla-La Mancha, proporcionando y recurso accesible y riguroso a investigadores, estudiantes e interesados en general en la historia de Castilla-La Mancha. “A través de este esfuerzo colaborativo–según se recoge en la web- buscamos fomentar el conocimiento, la inspiración y el orgullo en las contribuciones de nuestra comunidad a la sociedad global”.

Hasta ahora, este proyecto solo ha contado con dos subvenciones, una de la Diputación de a Guadalajara y otra de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.

Premio a un hombre del Renacimiento

Por Hilario L. Muñoz

Publicado en La Tribuna de Ciudad Real el 29 de enero de 2025

El poeta y artista José Corredor Matheos es el primero en recibir en un acto público el homenaje de la Academia de Ciencias Sociales y Humanidades de Castilla-La Mancha

La Academia de Ciencias Sociales y Humanidades de Castilla-La Mancha celebró ayer un primer encuentro con la sociedad. Lo hizo en la entrega del premio de esta entidad, surgida en el seno de la UCLM, al poeta, diseñador, escultor, crítico literario y artista José Corredor Matheos. El alcazareño, Premio Nacional de Poesía, fue calificado como «un hombre del Renacimiento» en este acto organizado en el antiguo Casino, con presencia de buena parte de los académicos de esta entidad científica y público en general que quiso escuchar a una de las voces más importantes de la poesía del siglo XX.

«Se trata del primer premio propuesto por la sección de Literatura y Lengua Española», explicó el presidente de la Academia, Luis Arroyo Zapatero, quien fue reelegido por cuatro años más al frente de esta entidad recientemente. Arroyo usó un poema de Corredor Matheos con las palabras cambiadas para calificarle: «Él dice que es un gorrión, pero es un águila imperial de la literatura y de la poesía, además de las tareas editoriales».

Con «profundo agradecimiento» recibió este premio el poeta alcazareño, que ha vivido muchos años en Barcelona, pero que como él mismo dice no se ha «despedido nunca» de su pueblo. «Cuando eres como yo, que voy a hacer dentro de dos meses los 96 años, me sorprende que todavía pueda volver y que me sienta bien». De hecho, a modo de explicación, dijo que «el gran poeta catalán Foix», decía que él era «el catalán de La Mancha». «Yo le dije que era al revés, que era el manchego de Cataluña», indicó.

Premio a un hombre del RenacimientoDe hecho, Corredor Matheos tuvo palabras en recuerdo de su tierra siempre, incluso cuando se ha sentido «extraño» en Cataluña, durante los momentos de más auge del separatismo y le pedían que leyera los poemas en catalán. Por este motivo, ver cómo baja ese sentimiento separatista es «una satisfacción».

Corredor Matheos explicó que aún sigue escribiendo, pese a que ya se ha publicado su obra completa. «Lo que pasa es que yo cada vez soy más exigente», con el objetivo de que nadie piense que hace algo más flojo por la edad. Con todo indicó que aún está a tiempo de presentar algún libro más. «Lo siento por el público, pero lo intentaré», aunque, eso sí, no sabe cuándo será.

En el acto estuvieron presentes la viceconsejera de Cultura, Carmen Teresa Olmedo, y el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, a quienes el presidente de la Academia les pidió su apoyo para que Ciudad Real aporte para que esta entidad de ámbito regional tenga su sede en la capital.

 

Premio a un hombre del Renacimiento

Academia de Ciencias Sociales y Humanidades

Por Jesús Fuentes Lázaro

Publicado en El Digital de Castilla-La Mancha el 28 de enero de 2025

Lunes, 20 de enero de 2025. Ese día el mundo giraba con el ritmo de siempre, aunque por algunos acontecimientos parecía que fuera más rápido de lo habitual. En Davos (Suiza) se reunían presidentes de gobiernos y financieros del mundo para analizar la marcha global  de la Economía. Mientras en los Estados Unidos de Norteamérica tomaba posesión de su cargo el nuevo presidente Donald Trump. Su aparición como 47 presidente abrirá un tiempo que vaticina todas las incertidumbres por el nacimiento de un nuevo orden mundial. En cuanto a la meteorología, amenazaba lluvia, pero no esa lluvia torrencial que arrasa cosechas y levanta carreteras, sino una lluvia  mansa, discreta, austera, como  la Mancha.

Más humildes, pero no menos importantes, en el paraninfo de la Universidad de Castilla- La Mancha, en Ciudad Real, gentes llegadas de toda la Región se reunían para cumplimentar la sesión anual de la Academia de Ciencias Sociales y Humanidades de Castilla -La Mancha. Un trámite ordinario de un proyecto extraordinario que pretende aglutinar la inteligencia, la ciencia, la sabiduría y la sensibilidad de gentes de toda la Región sin atender a definiciones o clasificaciones. Solo se trata de encontrar espacios de trasmisión de experiencias y conocimientos en territorios afines.

La reunión se celebraba en la sede del Rectorado de la Universidad, situado en la vieja Casa de Misericordia, que el cardenal Lorenzana fundara en la ciudad en el siglo XVIII, tras su cierre reconvertida en cuartel militar. En ese espacio, antigua capilla de diseño esbozado, recuperado como lugar de reunión y encuentro, comenzaba el desarrollo del Orden del Día, la reelección del presidente Luis Arroyo Zapatero y vicepresidentes, la relación de nuevos académicos y la presentación de trabajos y proyectos que comprendían desde un Diccionario  Biográfico de Castilla la Mancha, ya en la Red, pasando por la recuperación de Castillos, paisajes y rutas culturales, analizando el potencial del sector agroalimentario de la Región y recalando en lo que serán nuevas rutas   por los paisajes mineros históricos de Castilla la Mancha. Un programa ambicioso desarrollado por gentes altruistas. En fin, en un lunes agitado a nivel mundial se celebró un acto protocolario que da contenido a un proyecto  intrarregional que pretende articular el potencial intelectual de una Comunidad Autónoma tan nueva como  es Castilla- La Mancha.

Precisamente esta Academia de Ciencias Sociales y Humanidades por su dimensión y pluralidad ha conseguido el apoyo entusiasta de distintas Diputaciones Provinciales y de la Junta de Comunidades para avanzar con proyectos de interés colectivo hacia un espacio de convergencia de los   territorios que conforman la Región. Un punto de convivencia y futuro que posibilite desde el altruismo y la generosidad de personas en activo y otras jubiladas construir un sentimiento común de pertenencia, no fácil de conseguir. Comunidades con mayor experiencia han necesitado más de un siglo, al menos, para llegar al estadio en el que ahora se encuentran. Castilla-La Mancha, que apenas ha iniciado su andadura, aunque pueda parecer que lleva muchos años de existencia, es todavía un lugar joven en ese proyecto de confluencia territorial aunado o movido por idénticos objetivos. Tal vez el símbolo de ese proceso lo encarne el sobrio y diáfano paraninfo del Rectorado rehabilitado por el arquitecto Diego Perís y con sus minimalistas lámparas, diseñadas ad hoc, en las que rayos hiperfeericos de fotones cobrizos iluminan desde lo alto la actividad de cuantos allí se juntan. En esta reunión, los académicos antiguos y los nuevos, a la espera de    sucesivas incorporaciones, avanzaron en los cimientos de un proyecto cuyos objetivos nos son otros que el incremento de la ciencia y la sabiduría, la belleza artística o paisajista de Castilla la Mancha, más cuantos campos de conocimiento puedan agregarse.

A propósito de la Conferencia de Presidentes de CC.AA: Condonación de Deudas Autonómicas y Riesgo Moral.

Por Juan José Rubio Guerrero

Publicado en el diario Expansión el 14 de diciembre de 2024

La condonación del 20% de la deuda del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) a Cataluña, planteada en los acuerdos de investidura del presidente de la Generalitat, parece que podría ser generalizable al resto de Comunidades Autónomas (CC.AA), incluso a aquellas que no han accedido a los mecanismos financieros extraordinarios o lo han hecho en cuantía menor, también las de régimen foral. En la reunión del 13 de diciembre de 2024 de la Conferencia de presidentes se ha emplazado a una próxima reunión del Consejo de Política Fiscal y Finaciera en enero de 2025 para negociar este aspecto critico en la sanidad futura de muchas CC.AA, pero también de las Administraciones Públicas en su conjunto.

Siendo justos, si esta quita parcial de la deuda se hace por el mismo importe per cápita o porcentual en todas las CCAA, no deberían resolverse las críticas de agravio comparativo que ya han sido formuladas desde algunas de ellas, dadas las diferentes causas por las que ha aflorado el nivel de endeudamiento en cada territorio. Una quita parcial lineal y general para todas las CC.AA podría resultar injusta sin considerar las razones de ese endeudamiento, que no ha sido idéntico por Comunidades. Por ejemplo, la Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia y Castilla-La Mancha deben ese endeudamiento en gran parte a una financiación insuficiente del Sistema de Financiación Autonómica del 2009 respecto a la media, mientras que Cataluña ha recibido una financiación suficiente y alineada con la media en el modelo. Pero además resultaría insuficiente para que comunidades especialmente endeudadas con el FLA, como la Comunidad Valenciana o Cataluña, puedan volver a los mercados: continuarían enfrentándose a primas de riesgo muy sustanciales.

Todo ello nos aboca a una reestructuración interna de la deuda pública, asumiendo la Administración Central parte de las distorsiones generadas por el modelo financiero, sin olvidar la derivada de los mecanismos extraordinarios de financiación en las fases críticas de la sociedad española estos últimos diez años.

La escasez global de recursos financieros disponibles a través del sistema fiscal general hará que se produzca una mera transferencia de deuda entre Administraciones Públicas. En esencia, esa condonación sería un apunte contable: a todos los españoles se les eliminaría de forma simultánea un pasivo (en las cuentas autonómicas) y un activo (en las cuentas estatales) de la misma cuantía. Sin embargo, la deuda pública consolidada del Reino de España sería idéntica tras una operación, que podría justificarse apelando a la incertidumbre e intensidad de la recesión y su impacto sobre las finanzas autonómicas.

Conviene señalar que el reparto de esta Deuda Pública no sería neutral, considerando que los ciudadanos de aquellas comunidades con bajo endeudamiento autonómico, asumirían, a través del incremento en la Deuda del Estado, parte de las deudas condonadas a las CC.AA más endeudadas. Sería un, a modo, de mutualización de la Deuda Pública que podría beneficiar claramente a aquellas CC.AA fuertemente endeudadas, pero penalizaría a los ciudadanos de aquellas comunidades que, habiendo cumplido incluso en fases de crisis sus obligaciones de equilibrio fiscal pagarían los desajustes de aquellas comunidades más endeudadas.

En todo caso, la reestructuración de la deuda autonómica, si adopta la forma de condonación parcial planteada exigiría una revisión del marco de estabilidad presupuestaria para las CCAA y los instrumentos para hacer frente a crisis intensas futuras sobre las finanzas autonómicas, a fin de que la condonación no genere expectativas de nueva deuda autonómica, nuevos rescates mañana y pérdida de credibilidad en los mercados financieros del conjunto de las Administraciones Públicas españolas.

Una situación paradigmática de riesgo moral viene ocurriendo cuando una Comunidad Autónoma se beneficia de cierta relajación en sus políticas de gasto respecto a los compromisos de equilibrio fiscal asumidos con la Administración Central y con el resto de las CC.AA, esta situación provoca que, en caso de que sean otras Administraciones las  que soportan los costes asociados a la falta de esfuerzo o responsabilidad, los incentivos a esforzarse o ser responsables estén distorsionados y minimizados. El riesgo moral reduce la capacidad de los agentes económicos para asignar eficientemente el riesgo y la responsabilidad fiscal y este riesgo es particularmente elevado en un sistema de financiación y gasto descentralizado como es el nuestro.

Fue la Transición, hombre

Por Jesús Fuentes Lázaro

Publicado en El Español – El DigitalCLM el 15 de octubre de 2024

Día 7 de octubre de 2024, en la Biblioteca Regional de Castilla-La Mancha, en Toledo, el expresidente de la Comunidad, José María Barreda Fontes, presenta el libro titulado «Un militante de base en (la) Transición», (Cátedra). Con prólogo de Nicolás Sartorius, narra el tiempo que va desde los últimos años de la dictadura hasta los comienzos de un proceso que se terminó llamando Transición. En el libro se cuentan los impulsos de una historia, por primera vez, colectiva, los movimientos sociales, la evolución ideológica de unas gentes que desde la revolución teórica evolucionaron hacia la praxis de una democracia liberal. Se organiza en 26 capítulos que contiene apuntes de diario personal, sucesos de la época, cambio ideológico de quienes, desde la Universidad, influidos por el Partido Comunista de España, confluyen en la necesidad de transitar hacia una democracia social, justa, igualitaria y democrática. Se retrata al prototipo de universitario de la época, casi todos de extracciones burguesas, las asociaciones de vecinos en lucha por una vida digna en los barrios marginales, los trabajadores de las fábricas, empeñados en conquistar derechos laborales y la creencia colectiva de que la prolongación de la dictadura carecía de futuro.

En el tránsito, los exiliados de la guerra civil y las oleadas de emigrantes para trabajar en una Europa en desarrollo, tuvo mucha más capacidad de influencia de lo que se ha estudiado. Sabían lo que es sobrevivir en territorios que no eran el suyo. Experimentaban la universal y eterna tragedia del exilio y sus desarraigos sin ocaso. No es casualidad que la ideología y las estrategias más influyentes del PCE, el partido más amplio en la Universidad y en las fábricas, procedieran del exilio exterior. Durante el periodo de la dictadura, desde la terminación de la guerra civil, se debatía infructuosamente en el exilio sobre la caída inminente de la dictadura. Un final que se retrasaba, a pesar del desarrollo que se implantó en Europa tras la Segunda Guerra Mundial. España quedó marginada. El sueño de los exiliados de una vuelta a España se fue diluyendo entre las frustraciones internacionales y el desgaste cotidiano de la supervivencia. Tardó en llegar, pero llegó, la aceptación de que Franco sólo desparecería de España por la vía natural. Así ocurriría. Y cuando se produjo ya no había espacio nada más que para una democracia occidental. La revolución proletaria, poco a poco, se percibía en su autentica dimensión de dictadura. Los objetivos cambiaron de orientación. Había que emplearse en conseguir una democracia lo más social posible, lo más libre posible, lo más igualitaria posible, lo más europea posible. Se impuso el pacto de reconciliación nacional que implicaba la superación, esta vez definitiva, del desastrado siglo XIX y parte del siglo XX, que habían mantenido a España en el atraso en el que se encontraba a la muerte del dictador. ¿Existieron condiciones para otra cosa que no fuera lo que se hizo? Desde la distancia, tal vez si, desde la realidad cotidiana no se percibía otra mejor. Que aquello fuera posible por un pacto entre los herederos de los vencedores y de los vencidos explica el éxito y las lagunas de aquella Transición. Participaron le elites, pero también los ciudadanos y, como no, los países del entorno europeo, lugares de libertades y progreso a los que se aspiraba a pertenecer. Lo cuenta José María Barreda Fontes en un libro pedagógico, plagado de referencias del momento, sentimientos y emociones colectivas. Se desmentía así, (el tempo histórico no es el mismo que el de las personas), a Gil de Biedma que había escrito que «de todas las historias de la Historia sin duda la más triste es la de España, porque termina mal».

Ni nos arrebataron ni nos arrebatarán la esperanza y la ilusión

Por Antonio Marco

Publicado en El Decano de Guadalajara el 6 de noviembre de 2024

Desde que todos los males salieron en tropel de la caja, jarra o tonel, de Pandora por la incontinencia e imprudencia de Epimeteo y se esparcieron entre los hombres como castigo de los dioses por nuestra soberbia y por el mal uso de las propias habilidades con que Zeus dotó a los hombres para vivir en una sociedad armónica y tranquila, se acabó para la humanidad la inicial época de felicidad terrenal. Solo quedó en la caja o tonel la esperanza y a ella nos agarramos frecuentemente los hombres.

Hay momentos en los que los males se nos vienen encima de manera silenciosa y pausada y otras en las que nos caen en tropel con mucho ruido y abundancia. El momento en el que vivimos parece ser de estos últimos para muchos compatriotas; todo o gran parte del edificio social y cultural parece venirse abajo, sin que a esa apariencia sea ajeno el permanente bombardeo de los medios de comunicación, los mass media más poderosos que nunca y las redes sociales, universales y usadas por millones de personas con carencia frecuentemente de todo sentido crítico y a veces ético, que se regodean en los males con olvido de los bienes o incluso buscan conscientemente crear un ambiente general de inseguridad, de preocupación, de negatividad, opacando al buen periodismo que a duras penas logra subsistir.

Es verdad que no faltan motivos graves y serios para ello. Uno es, sin duda, la existencia de numerosas guerras en todos los continentes, expresión perfecta de la autodestrucción y contradicción humana: el hombre, orgulloso de su ser racional, pretende arreglar las diferencias con la violencia mortífera propia de las bestias. Algunas guerras son especialmente importantes y dolorosas porque nos afectan muy cercana y directamente, como la de Oriente Próximo con la destrucción sistemática de la franja de Gaza y el pueblo palestino y la escalada creciente del conflicto entre judíos y grupos palestinos, países musulmanes y facciones terroristas hasta hacer posible un enfrentamiento nuclear, y la guerra de Ucrania en nuestras fronteras, en la propia Europa, ocupada en parte por una Rusia que volvemos a considerar enemiga de Occidente, con peligro también de guerra nuclear. En ambos conflictos, desde mi punto de vista, la Unión Europea, con importantes problemas de coherencia interna, no ha estado en el pasado próximo ni está tampoco ahora a la altura de las circunstancias con una intervención propia enérgica y diferenciada. Ingenuamente creíamos que las guerras en Europa resultarían imposibles después de las experiencias de las dos últimas ‘guerras mundiales’.

No es menor el mal que no deja de extenderse del avance de las posiciones ideológicas y políticas de ultraderecha, trufadas siempre de racismo y totalitarismo fascistoide. También esto nos parecía ingenuamente imposible después de la destructora experiencia de la primera mitad del siglo XX, particularizada además en España por una guerra civil de casi tres años de duración y muchos más de postguerra cruel sin libertades, algunos de cuyos efectos no dejan de estar presentes y desaparecer definitivamente. El auge de la ultraderecha, minusvalorado o aceptado ahora con cierta normalidad por muchas personas, amenaza y pone en cuestión la etapa de la historia más justa y humana, al menos en Europa y en el mundo occidental con repercusión en todo el planeta, la de la socialdemocracia y la creación del ‘estado de bienestar’ con indudables avances en el reparto de la riqueza de los pueblos.

Este triunfo no es en realidad sino el del neoliberalismo económico, que todo lo reduce a dinero, al valor material de las cosas y cuya única razón de existir es la lucha por la acumulación de riqueza por quien sea capaz de ello con los medios de que disponga sin límite alguno. De ahí surgen las propuestas de buscar la confrontación con el propio Estado regulador en sí y con cualquier medida de limitación a su ambición absoluta proponiendo el ‘estado mínimo’ que armonice la vida de la sociedad. Este liberalismo es muy distinto del propuesto por Jeremy Bentham y John Stauart Mil, sus creadores frente a un estado que todo lo invada. Como consecuencia, el reparto de la riqueza del planeta es absolutamente desigual, coexistiendo fortunas personales o societarias inmensas, mayores incluso que los presupuestos de muchos estados, con pobreza inhumana para grandes sectores de la población. Esta situación resultará, no tardando, incompatible con la existencia pacífica de una sociedad mínimamente justa y cohesionada, como la Historia de la humanidad nos enseña.

A todo ello colabora la pérdida o o minusvaloración de la racionalidad, del interés por la verdad, sea la que proporciona la ciencia o el estudio riguroso de la historia o la filosofía lejos de toda mitificación, o la obligación de transmitir los hechos como son y no divulgar y generalizar noticias falsas, mentiras, fake news en la lengua del imperio que se va imponiendo.

Asimismo la práctica y comportamiento egoísta y corrupto de responsables políticos, elegidos para mayor dolor en un sistema democrático, a los que los partidos políticos no logran erradicar absolutamente, no pueden sino ahondar el sentimiento de engaño y desamparo del ciudadano.

A nadie deberá extrañar que con este entorno la moral personal y colectiva, el comportamiento ético compatible con el necesario humanismo, también con el humanitarismo, de una sociedad estructurada y pacífica, no estén absolutamente generalizados sino ausentes en muchas ocasiones.

Todo esto produce un impacto doloroso en muchos ciudadanos, de manera muy especial en quienes nos ha tocado vivir en nuestra juventud una situación anterior bien distinta de la de ahora de nuestros hijos y nietos, que fue la de luchar contra una dictadura y trabajar para asentar las libertades. Por ello nos desconcierta y duele inmensamente la ignorancia e incomprensión de las generaciones jóvenes, como la de nuestros hijos, de la radical evolución de nuestros país, que hizo una transición pacífica, modélica e incluso nunca imaginada de una larga y cruel dictadura a una democracia moderna. Ello no significa que la transición fuera fácil ni absolutamente pacífica; en los estertores del franquismo se produjeron episodios de enorme crueldad, con represión y numerosas penas de muerte incompatibles con un estado moderno, con grupos fascistas actuando violentamente y con centenares de crímenes de la banda terrorista ETA, que actuaba con más crueldad precisamente cuando más se avanzaba en el logro de las libertades.

Si a todo ello se nos añaden catástrofes naturales nunca vistas en nuestro país como la destructiva y mortífera dana de lluvias torrenciales que matan a centenares de personas y destruyen todo lo que encuentran a su paso que afecta a toda España, especialmente a la fachada mediterránea, parece indubitable la venganza cruel de Pandora esparciendo sus males y se agudiza el sentimiento de incapacidad y destino fatal del que no podemos librarnos, olvidándonos de nuestro pretencioso enfrentamiento a una poderosa naturaleza y la colaboración en el desastre por acción u omisión.

La llegada natural y cíclica del otoño, que anuncia el próximo invierno con sus largas noches por la  disminución de la luz y del calor del Sol tan necesarios para nuestra propia vida feliz, y alguna situación personal no deseada, abundarían en el mismo efecto descorazonador.

Estas reflexiones tan generales y comunes, siempre presentes o recurrentes con mayor o menor insistencia en los últimos tiempos, se me han reavivado con la lectura incontenida del libro de quien fuera Presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, titulado ‘Un militante de base en (la) transición’. En este interesantísimo libro, muy bien escrito, Barreda nos relata su experiencia personal como joven estudiante comprometido con el final de la dictadura de Franco y el no fácil alumbramiento de la democracia de la que hoy disfrutamos. Muchos de los momentos y circunstancias que en él describe con pasión, inteligencia y documentación, los vivimos también muchos miles de jóvenes estudiantes primero y luego incipientes profesionales; algunos empezamos a militar en partidos políticos e incluso asumimos responsabilidades políticas de más o menos importancia. José María Barreda desempeñó numerosas de estas responsabilidades, la más importante la de la Presidencia de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha durante dos legislaturas.

Pues bien, cuando se oyen con estupor afirmaciones y opiniones que no solo no valoran positivamente lo que fue la transición sino que incluso hacen una crítica ácida y destemplada de aquel modélico proceso de ‘transacciones’ entre unos y otros para hacer posible la deseada pero nada fácil ‘transición’ de una larguísima y cruel dictadura con negación de todas las libertades y ningún respeto por las personas, su dignidad y su diversidad, a un sistema político democrático homologado con los países europeos basado en el estado de derecho y respeto a los derechos de las personas, el libro y pensamiento de un historiador y político que tuvo grandes responsabilidades de gobierno, nos sirve para reafirmarnos en la importancia de lo vivido y en la posibilidad real de hacer siempre mejor las cosas. La transición fue un éxito, un gran éxito colectivo de un país que ansiaba libertad. Así empieza precisamente el libro de José María Barreda y la exposición de esa tesis es precisamente su intención: «… la transición fue un éxito democrático en la historia de España… Tal vez no fuera perfecta, todo es perfectible, pero fue sin duda muy útil: una operación política que permitió pasar de una dictadura a una democracia…».

Quienes ahora, sin haber vivido o conocer con profundidad aquellos momentos, niegan el éxito de aquel proceso para contribuir también al desconcierto e inseguridad social del momento, quienes cuestionan las bondades de nuestro sistema democrático aprovechando la verdad y la mentira, en realidad lo que añoran o desean es un estado autoritario donde una minoría imponga sus ideas y deseos a la mayoría de ciudadanos que en una democracia son quienes tienen el poder de decisión.

Así que en momentos de menor seguridad podemos pensar que no faltan motivos para el desánimo y la desesperación, pero en realidad también hay motivos para la esperanza, que no nos fue arrebatada. Frente al incomprensible atractivo que la violencia y la guerra tienen para muchas personas podemos oponer una permanente educación para la paz, la tolerancia y la empatía. Frente al desprecio de la razón y la verdad y la manipulación de los mentirosos, siempre se podrá educar y formar en el espíritu crítico de la inteligencia. Frente a la ideología del egoísmo, la desigualdad y la debilidad de la sociedad, podremos oponer la necesidad, avalada por la historia, de la empatía, la igualdad, la democracia y la preeminencia del bien común porque las personas compartimos una misma humanidad. Frente a las acciones violentas de la naturaleza, podemos corregir en alguna medida el comportamiento humano irresponsable con la naturaleza y en todo caso, aunque débiles e incapaces frente al huracán o la dana, podremos mejorar el conocimiento, la prevención y la reacción. Frente a la elección de dirigentes y políticos ineptos y corruptos, podremos acertar mejor en nuestra elección y ser absolutamente intransigentes con el engaño. Frente a los que desconocen la historia y el pasado, siempre podremos oponer el estudio y el conocimiento de lo ocurrido.

No soy ni un conformista ni un ingenuo optimista, pero mantengo la esperanza de que el mal no solo no es inevitable sino que las cosas siempre pueden mejorar si todos colaboramos para ello y no dudamos en enfrentarnos pacíficamente al mal.

Ceremonia de entrega de los XI Premios de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo

Acto de entrega de los premios de la RABACHT

05 de julio de 2024. Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo

La iglesia de San Román de Toledo acogió el pasado viernes 5 de julio de 2024 la ceremonia de entrega de los XI Premios de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo. La jornada incluyó también la imposición de la medalla de académica correspondiente a Almudena Cencerrado Rodríguez.

Los galardonados, elegidos en sesión extraordinaria el pasado 21 de mayo, fueron los siguientes:

• Escuela de Arte de Talavera de la Reina (Arte). Por ser un centro de referencia en la formación de jóvenes en diseño aplicado a la artesanía, en especial de la cerámica. En 2023 celebró el 40 aniversario de su fundación, así como la novena edición de sus jornadas «Diseñarium», que programan numerosas exposiciones, conferencias y talleres destinados a la formación de nuevas generaciones de artistas en la provincia.

• D. José Carlos Vizuete Mendoza (Historia). Por su amplia trayectoria investigadora, que han convertido a este Profesor Titular de Historia Moderna de la Universidad de Castilla-La Mancha (Facultad de Humanidades de Toledo), comisario de grandes exposiciones, y un referente para el estudio de temas relacionados con la Iglesia y la antigua Universidad de Toledo.

 Festival Voix Vives (Literatura). Por ser un ejemplo de experiencia literaria, que desde su primera edición en 2013 se ha consolidado por sacar la poesía a la calle y facilitar el contacto con la gente. Destacan sus campañas de difusión basadas en la participación del pequeño comercio, así como su capacidad de convocatoria de poetas procedentes de distintos puntos del Mediterráneo.

• Fundación Cigarral de Menores (Patrimonio). Por asegurar, mediante la fórmula de constitución de una fundación en 2023, el patrimonio cultural del Cigarral de Menores, que adquirió Gregorio Marañón y Posadillo en 1921. Desde entonces se ha mantenido en el seno de la misma familia, que impulsó su declaración como Bien de Interés Cultural en 2007.

 Estudio Vértice (Rehabilitación). Por su interés en la recuperación de los valores del Casco histórico de Toledo y de diferentes puntos de la provincia. Entre sus obras más conocidas destaca su participación en la musealización, recuperación y consolidación de los restos del convento de Santa María de Torrijos (colaborando con la dirección facultativa según el proyecto de Juan Antonio Carpio), así como las rehabilitaciones del Hotel Zocodover (Grupo Adolfo) y los patios de las calles Nuncio Viejo y Juan Bautista Monegro, entre otras obras.

• Proyectos de recuperación del lince ibérico por parte de la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha (Patrimonio Natural). Por haber contribuido a revertir las serias amenazas de conservación del lince ibérico, que hace apenas unos años era considerado el felino más amenazado del mundo y había desaparecido de los Montes de Toledo. Gracias a sus esfuerzos, la especie ha sido reintroducida con éxito dentro de esta provincia.

¿La Quiebra de la Hacienda Pública Española?

Por Juan José Rubio Guerrero

Publicado en El Espańol el 31 de Julio de 2024

El preacuerdo de investidura suscrito entre el Partido socialista y ERC viene a reeditar, en el ámbito económico institucional, una propuesta que ya tuvo su recorrido hace más de 10 años. Se trata de un denominado “Pacto Fiscal entre Cataluña y el Estado español”. Vamos a tratar de desentrañar, a partir de la formulación de este acuerdo que llegó a ser aprobado por una resolución del Parlamento catalán,  los elementos que ahora se reeditan en el acuerdo de investidura de Illa.

La propuesta se reduce básicamente a la extensión a Cataluña de un sistema de foralidad similar, en sus aspectos fundamentales, a un régimen de concierto o convenio como el que opera en el País Vasco o con Navarra, aunque, previsiblemente, con algún mecanismo de solidaridad interterritorial a través de una aportación a la nivelación interterritorial, que no existe en el caso foral, más allá de la aportación al Fondo de Compensación Interterritorial.

El Pacto Fiscal buscaría que la Generalitat asuma la plena capacidad de decisión sobre todos los impuestos que son exigibles en su ámbito territorial. Es decir, que la legislación, gestión, control e inspección de aquellos se realice a través de una Agencia Tributaria catalana, al margen del Agencia Tributaria del Estado, y, con ello, reducir gradualmente la aportación catalana a la Hacienda del Estado, con el fin de reducir un pretendido déficit fiscal. En concreto, se trataría  de regular, recaudar y gestionar directamente todos los impuestos en su demarcación territorial, así como la titularidad del 100% de los rendimientos de tales tributos, por lo que incluso podría  ir más allá de régimen de Concierto y Convenio que tiene limitaciones en algunos impuestos.

La regulación del sistema tributario catalán se fundamentaría, llegado el caso, únicamente en el Estatuto, normas de desarrollo y normas tributarias catalanas, siendo subsidiarias  las del resto del Estado. Ambos sistemas fiscales sólo tendrían como punto de conexión una Comisión bilateral Mixta, lo que supone una ruptura radical de la preeminencia legislativa en temas fiscales, basada en normativa fiscal básica del Estado con cierta  capacidad normativa para las CC.AA. Las consecuencia serían evidentes, cuando se habla desde el gobierno de armonización fiscal en ciertos tributos, Cataluña  tendría impuestos diferentes y podría hacer competencia fiscal al resto de España, incluso con el Impuesto de Sociedades. Esta posibilidad,  entiendo, es  incompatible con nuestra Constitución al atentar contra el principio de unidad  de mercado.

La aportación catalana a las arcas del Estado se negociaría bilateralmente cada cierto período, y tendría dos componentes: a) una cuota para cubrir el coste  de las competencias no transferidas que provee  el Estado en Cataluña, y b) una aportación a la solidaridad interterritorial, pero esta aportación, que dependería de la voluntad de las autoridades catalanas, tendría un carácter condicional, de manera que habría que destinarse a servicios básicos del Estado de bienestar, y no podría hacer que Cataluña perdiera posición relativa en financiación per cápita en relación a su situación en términos de capacidad fiscal, es decir, aplicación sin condiciones del principio de ordinalidad. Por lo tanto, es cierto que en la propuesta podría articularse el principio de solidaridad interterritorial, pero entendida  de forma unilateral, en forma  de concesión graciosa, ya  que los límites a la solidaridad vendrían prefijados por la voluntad de las autoridades catalanas, y dependería de una plena cobertura, en cantidad  y calidad, de todos  los  servicios públicos en su territorio, con lo discrecional que supone el concepto de “plena cobertura”.

En todo caso, la propuesta supone una ruptura del actual sistema de financiación basado en la Constitución y en la LOFCA. Se pasaría de un sistema de relaciones multilaterales, donde las CC.AA.. deciden conjuntamente con el Estado, en el Consejo de Política Fiscal, a un sistema de relación bilateral, a través de una previsible Comisión Mixta Estado-Generalitat, y donde el modelo de funcionamiento que subyace, con una situación de preeminencia del gobierno catalán, sería más propio del Derecho Internacional, al plantearse como una relación entre Estados soberanos.

Desde un punto de vista estrictamente económico, la propuesta de Pacto fiscal es contraria a la racionalidad económica y administrativa en un Estado moderno y desarrollado. No se puede abundar en el error de un endemismo fiscal, como es el sistema de Concierto, creando nuevos endemismos  fiscales por razones políticas espúreas como es salvar un previsible gobierno socialista en Cataluña,  y que comprometen el edificio constitucional e institucional de un Estado europeo, democrático y desarrollado. Sin olvidar que el proceso de fragmentación fiscal comprometería la propia viabilidad de las funciones económicas del Estado y violaría los principios de igualdad y solidaridad interterritorial consagrados en la Constitución Española. El sistema de Pacto Fiscal, o como se llame, supondría una merma de los recursos del Estado para desarrollar políticas de equilibrio territorial y de desarrollo armónico del conjunto de la CC.AA.

Por lo que se refiere a los Servicios Públicos de CC.AA. menos desarrolladas, este esquema fiscal aumentaría las desigualdades interterritoriales en financiación, lo que resulta contrario al artículo 138 de la CE, que señala, entre otras cosas, que las diferencias entre los Estatutos de las distintas CC.AA. y sus normas de desarrollo, no podrán implicar, en ningún caso, privilegios económicos o sociales.

Sin olvidar que todas aquellas regiones que aportan recursos al sistema de nivelación territorial, singularmente el caso de Madrid, se verían justificadas en la reclamación de un tratamiento financiero similar, por lo que, si el sistema se generaliza, caminaríamos hacia un sistema con una Administración Central muy debilitada e incapaz de cumplir funciones básicas, incluyendo la redistribución de renta y riqueza tanto a nivel personal como regional. No olvidemos que grandes partidas de gasto público como las pensiones o el desempleo se articulan a nivel estatal, dependiendo cada vez más de los Presupuestos Generales del Estado.

Por último, y esto daría para un tratado, desde el punto de vista de la administración tributaria, no es eficiente para la gestión tributaría, por múltiples razones, la fragmentación de las agencias de un Estado. Los flujos de información se articulan como eje fundamental de un sistema moderno de control y administración fiscal. Las deficiencias en materia de coordinación y colaboración entre agencias tributarias diferenciadas, difícilmente resolubles haría que se produjesen pérdidas de información en la gestión de los tributos, con la consecuente pérdida de eficiencia inspectora y el incentivo a un mayor fraude fiscal.

La ruptura del modelo de hacienda y de financiación autonómica, que no olvidemos, se reformó en 2009 bajo el impulso de la reforma del Estatuto de Cataluña, recogiendo buena  parte de las aspiraciones de esta Comunidad, y bajo cuyas reglas han jugado todas las CC.AA., en algunos casos sufriendo las consecuencias de una cruel infrafinanciación, constituye una deslealtad hacia las demás regiones y con el Estado. La ruptura del principio de solidaridad y el comienzo de una aventura de este  calibre puede conllevar un coste incalculable , tanto económico como social, muy elevado para la sociedad española y catalana.

En definitiva, “La Generalitat tendrá la llave de la caja. Gestionará, recaudará, liquidará e inspeccionará todos los impuesto”,  ha asegurado Sans. Si esto es así, me temo que será necesario algo más que una reforma de LOFCA, pero visto lo visto en este País se puede esperar cualquier cosa ya. Habrá que esperar para ver como se concreta este acuerdo sobre Pacto fiscal en Cataluña, pero la primera impresión es catastrófica. Es la claudicación del Estado en ese territorio y un paso más en la entrega de“estructuras de Estado” para una independencia por etapas, con anuencia de 2un gobierno central débil. Un consejo a las CCAA de régimen común,: Deberían estar al tanto y poner bajo escrutinio selectivo todo el proceso de desarrollo del modelo singular de financiación para Cataluña, porque en este envite se juega el futuro del Estado de las Autonomías y su diseño constitucional. Un salto al vacío!.

En todo caso, teniendo en cuenta intereses contrapuestos de fuerzas políticas en Cataluña y en el resto de España, el acuerdo está cogido con alfileres y puede reventar en cualquier fase del complicadísimo proceso de ejecución. Desde las bases de ERC, pasando por los celos independentistas entre Junts-ERC, la garantía de los apoyos parlamentarios suficientes en el Congreso para una reforma de este calado, difícilmente asumible por una izquierda que vende solidaridad nacional, sin obviar  posibles disidencias en el PSOE a partir de regiones seriamente perjudicadas con este neo modelo, ya que un apoyo incondicional a esta propuesta significaría un repudio de los electores en sus comunidades, de difícil olvido en futuros procesos electorales.

Paisaje de viñedos

Por Diego Peris

Publicado el 25 de agosto de 2024 en Lanzadigital.com

Con los cambios de variedades de uvas, los nuevos sistemas de cultivo y las modificaciones del clima, la vendimia se adelanta en muchos lugares a estas fechas de agosto. Y se cambian los sistemas y las condiciones. Ahora es importante la recogida nocturna o con condiciones que no hayan elevado excesivamente la temperatura para que la uva recogida de forma cuidadosa en cajas llegue a las mesas de trabajo de la bodega para su selección antes de empezar el proceso.

Las superficies del cultivo

El patrimonio industrial no se limita a las “fábricas” de producción. Abarca desde los espacios de obtención de la materia prima a los lugares de preparación y transformación, las prácticas de elaboración, los productos obtenidos, archivos y memoria del trabajo. En el patrimonio agroalimentario la importancia de los espacios de cultivo es esencial. Las superficies del viñedo, sus formas de cultivo, sus variedades y técnicas de mantenimiento y mejora son esenciales en el conocimiento de este patrimonio vitivinícola.

La extensión del cultivo de la vid en Castilla–La Mancha y la importancia de sus producciones, supera a todas las regiones vitivinícolas españolas. Tiene en la actualidad 460.000 hectáreas de viñedo, una producción anual de 2.905.595 toneladas de uva y unos 22 millones de hectolitros de vinos nuevos y mostos no destinados a la fermentación. Ello supone el 48 por 100 de la superficie de España dedicada a este cultivo y el 52 por 100 de las producciones totales de mostos y vinos de España. El viñedo de Castilla–La Mancha representa la mayor concentración existente de dicho cultivo en el mundo. Dentro de la estructura de Castilla–La Mancha, la superficie de vid es muy superior a la de otros usos, correspondiendo a un 5,4 por 100 de la total geográfica, un 18,3 por 100 de las tierras de cultivo, y un 73,3 por 100 de las dedicadas a cultivos leñosos, todas de gran magnitud, que superan toda comparación nacional e internacional. Números que dan cuenta de la importancia del cultivo y de la capacidad económica que genera esta actividad.

El paisaje del viñedo

El viñedo es un importante factor medioambiental en Castilla-La Mancha, elemento definitorio del paisaje, la cultura y la historia regional. La conjunción de todos estos factores convierte la conservación y el impulso del sector vitivinícola en un objetivo básico. Todo paisaje es cultural, no solo porque es visto por una cultura, sino sobre todo porque ha sido producido en el interior de un conjunto de prácticas (económicas, políticas, sociales), y de acuerdo con unos valores que, en parte, simboliza. La visión de los resultados y las dinámicas presentes en el paisaje nos muestran, en gran medida, el proyecto de sociedad que ha estado detrás de su producción. Hay en el suelo una huella continua del hombre, los paisajes industriales tienen en su conformación la huella del trabajo del hombre. Y el viñedo de Castilla-La Mancha es una referencia de la vida de la gente y del desarrollo de nuestra geografía y nuestras ciudades.

Una geología singular, una topografía de la horizontalidad, en la mayor parte de los territorios de cultivo, y unas condiciones meteorológicas favorables permiten un cultivo de altura reducida que cubre la superficie de verde durante meses y luego resiste las condiciones del invierno hasta la próxima primavera. Demográficamente el número de hectáreas de viñedo en Castilla–La Mancha es de 224 por cada 1.000 habitantes de población total. Un paisaje cultural con historia de siglos que se renueva con el paso del tiempo, que va adecuándose a los nuevos valores sociales, culturales y económicos, pero que tiene una permanencia que lo hace reconocible en ese devenir.

Denominaciones

El 99, 8 por 100 de la superficie de viñedo se destina a la producción de vinos, con escasa cuantía relativa de mostos, destinándose solamente el 0,2 por 100 a uva de mesa, y ello con variedades generalmente no selectas. La distribución global de viñedos para vino y para mostos no fermentados, en los últimos años, es de un 96% y un 4% aproximadamente. En Castilla – La Mancha existen en la actualidad,  22 denominaciones de origen de vinos que se reparten entre las cinco provincias de la comunidad autónoma: Almansa, Campo de Calatrava, Jumilla, La Mancha, Manchuela, Méntrida, Mondéjar, Ribera del Júcar, Uclés  y Valdepeñas y los 12 vinos de pago: Pago Casa del Blanco, Pago Calzadilla, Pago Dehesa del Carrizal, Pago Dominio de Valdepusa, Pago Finca Elez, Pago Florentino, Pago Guijoso, Pago Campo la Guardia, Pago del Vicario, Pago la Jaraba, Pago los Cerrillos y Pago Vallegarcía.

El viñedo aporta el 14% de la producción final agraria de Castilla-La Mancha, porcentaje sensiblemente superior a la media nacional que se cifra en un cuatro por ciento. La importancia social del cultivo se constata por el hecho de que en muchos municipios de la región se dedican al viñedo más del 50% de las tierras de cultivo. Hay un aumento paulatino de los rendimientos, como consecuencia de la aplicación de mejores técnicas de cultivo.

Producción del vino

La producción del vino ha generado una importante industria enológica, que se ha ido consolidando con el paso de los siglos como la más importante del sector agroalimentario de la región. Actualmente Castilla-La Mancha acoge el 37 % de las industrias vinícolas de España, siendo su producción una tercera parte de la nacional y asegurando más de 3.500 puestos de trabajo fijos. En Castilla-La Mancha, existen 218 cooperativas y SAT y 369 bodegas que no funcionan como cooperativas, 16 destilerías de las 43 existentes en España y 23 empresas de concentración de mosto.

La superficie de Castilla-La Mancha con más de ochenta mil Kilómetros cuadrados de superficie y 460.000 hectáreas de viñedo hace que este cultivo sea parte esencial de su paisaje y de su imagen. Un 5,4 % de su superficie total del territorio está cultivada con viñedos que, dada la diversidad de zonas climáticas, geológicas y topográficas, conforman paisajes diferenciados. Las denominaciones de origen no sólo reconocen peculiaridades en los vinos que allí se elaboran, sino que corresponden a paisajes singulares, a territorios diversos, a zonas con peculiaridades culturales que contribuyen a la riqueza de los cultivos y de los vinos que en ellas se elaboran. En la actualidad, el olivar ha igualado en superficie al viñedo. Y por ello los paisajes del viñedo y olivar en su conjunto superan el 11 % de la superficie de la comunidad autónoma.

El viñedo es elemento esencial del paisaje de Castilla-La Mancha como cultivo sostenible, adaptado a las condiciones geográficas, climáticas y edafológicas, conformando territorios en los que su presencia geométrica de cultivos cada día más cuidados constituye un elemento esencial conformador de la realidad cultural y económica de este territorio. La evolución de superficies, los cuidados de sus plantaciones y la presencia de nuevas variedades, así como la presencia de los cultivos en espaldera va modificando lentamente un paisaje que se consolida como elemento definidor del territorio de Castilla-La Mancha. Y junto a ellos, ya sea en los municipios o en espacios rurales, surgirá la arquitectura de sus bodegas.